Es, simplemente, el lugar en el que se vende de todo. Esta famosa calle tiene aproximadamente dos kilómetros de longitud, a lo largo de los cuales el visitante puede disfrutar de más de 300 establecimientos. Oxford Street no es la zona de consumo más a la vanguardia de Londres, como tampoco es la calle más cara o donde se concentren los locales de lujo.
El visitante que acude a la ciudad del Támesis debe saber que tiene una parada obligatoria en esta inmensa calle, ubicada en el centro de Londres y en la que puede encontrar desde grandes marcas –todas las del grupo Inditex, además de las firmas más importantes de Reino Unido, como Marks & Spencer o Primark- hasta complementos, juguetes, recuerdos o souvenirs.
Incluso, para los amantes de las celebraciones –ya sea un aniversario, un cumpleaños o una boda– existe en esta calle un establecimiento dedicado a este tipo de eventos, donde el comprador puede adquirir desde una tarjeta de felicitación –a elegir entre varios cientos de tipologías—hasta una tarta realizada a base de dulces. Y todo, a lo largo de más de 400 metros cuadrados en dos plantas.
La excelente ubicación en la que se encuentra Oxford Street le permite estar muy conectada: por ella pasan hasta cuatro líneas de metro y casi una decena de autobuses. Además, si el visitante quiere hacer un alto en el camino puede permitírselo en uno de los muchos bares, restaurantes y locales que se encuentran a lo largo de la misma.
Y si la visita se produce en Navidad, el encendido y la multitud de adornos que ocupan esta hermosa calle sorprenderán a más de uno. Además, cada año, una célebre estrella es la responsable de inaugurar el encendido que se prolongará durante todas las fiestas. Jim Carrey fue el encargado en 2011, ¿a quién le corresponderá este año?