En la popular zona londinense de Covent Garden se encuentra la iglesia de St Paul, también conocida como “la iglesia de los actores” por la estrecha relación que desde hace muchos años mantiene este templo con los actores de teatro. St Paul, que está rodeada por un bonito y tranquilo jardín y por un cementerio, sufrió un gran incendio en el año 1795 que afectó a gran parte de la iglesia, que tuvo que ser reconstruida, esta vez con un marcado estilo victoriano. A pesar de ello, las columnas del pórtico son las originales, las que creó el arquitecto Jones.
Fue fundada en el año 1631 por Francis Russell, el cuarto conde de Bedfort, que se la encargó al arquitecto Inigo Jones. Está ubicada en unos terrenos que antaño pertenecieron a la Abadía de Westminster, pero que, tras la disolución de los monasterios por parte de Enrique VIII, pasó a manos del conde Bedfort.
Entre las curiosidades de esta iglesia se encuentra la historia de la de la puerta sellada del lado este. Inicialmente, Inigo Jones la diseñó como acceso principal al templo, situando el altar en el extremo opuesto. Pero, según la tradición anglicana, el altar debe estar situado en el lado oriental, por lo que Jones tuvo que construir una nueva puerta. El templo dispone de otros cuatro accesos.
En el jardín de la iglesia encontramos varios bancos de madera en los que están insertadas diversas placas e inscripciones talladas con nombres, especialmente de actores de teatro de todos los tiempos.
La relación del teatro con la iglesia de St Paul se remonta casi hasta los orígenes del propio templo, por ello en el interior también se pueden contemplar placas con los nombres de actores tan ilustres como Charlie Chaplin, Noel Coward, Vivien Leigh, Flora Robson o Laurence Harvey, entre otros.
La iglesia de St Paul era el escenario de la primera escena de la obra Pygmalion, de George Bernard Shaw, que más tarde se convertiría en el musical My Fair Lady. Más información en la página web oficial de la iglesia de St Paul http://www.stpauls.co.uk/