Simpson’s-in-the-Strand

Para saborear la comida tradicional inglesa al más alto nivel culinario, el Restaurante Simpson’s-in-the Strand, en el hotel Savoy, es la opción más acertada, aunque para descubrirlo sea preciso realizar un desembolso económico importante, pero merece la pena. Este famoso restaurante comenzó su andadura en 1828 siendo un café propiedad de Samuel Reiss. Entonces se llamaba The Grand Cigar Divan, y sus clientes eran caballeros de la alta sociedad londinense que fumaban puros y jugaban al ajedrez.

En 1848 el restaurador John Simpson decidió asociarse con Reiss y crear el restaurante Simpson’s Grand Divan and Tavern, que contaba entre su elegante e ilustre clientela con políticos como Benjamin Disraeli o escritores de la talla de Charles Dickens. Catorce años después, Simpson vendió su parte a otro conocido restaurador de la época, Edmund W. Cathie, que fue quien decidió darle al restaurante ese toque totalmente británico.

Tras ser adquirido por el hotel Savoy en 1898, el Simpson’s cerró para ser reformado e incorporado al hotel. El restaurante reabrió sus puertas en el año 1904 bajo el nombre que lleva en la actualidad, Simpson’s-in-The Strand, Grand Divan Tavern.

En este restaurante, toda una institución en Londres, todo respira un aire británico 100%, desde la decoración hasta la carta (donde destacan sus carnes asadas, como el roast beef, o los platos de caza), pasando por el exquisito servicio o sus increíbles desayunos, con siete platos diferentes.

Entre los platos más afamados de Simpson’s-in-The Strand se encuentran la pechuga asada de paloma torcaz (en temporada) con judías verdes, patatas y tocino; la sopa de langosta; el salmón ahumado escocés; el Roast Rib of Scottish Beef, una carne escocesa muy especiada; el pudding de Yorkshire o el Steak & Kidney Pie. De postre es imprescindible probar el Simpson’s Treacle Sponge with Vanilla Custard, una especie de esponja de melaza con crema de vainilla de Madagascar.

En su completísima carta de vinos destacan los caldos franceses, pero también hay un hueco para los vinos españoles, argentinos o chilenos.

Una de las tradiciones más clásicas del Simpson’s-in-The Strand, desde el año 1848, es trasladar sus piezas de carnes asadas en unos carritos de plata, tradición que todavía hoy se conserva para las cenas, mientras se disfruta de la música ejecutada por un pianista.

Desde el año 1999, el Simpson’s-in-The Strand dispone también de un Cocktail Lounge al más puro estilo art decó, el Knight´s Bar, cuyas copas resultan perfectas como aperitivo previo a la comida o la cena.

Posee un menú diario con varios platos a elegir por 31 libras, sólo hasta las siete de la tarde.

Más información en su web oficial www.simpsonsinthestrand.co.uk